Escribir el “Sobre mí” de una página web

Por si alguien está todavía muy despistado, estoy hablando de esa sección que cualquier página web tiene (o debería tener) que se llama también “Quiénes somos” o a veces “Acerca de”, “Nuestra historia” o algo similar; o, si nos ponemos un poco anglosajones, “About us”. Suele estar arriba a la derecha o abajo, al fondo. Bueno, qué mejor ejemplo que el mío propio: este es mi “Sobre mí”.

Por si acaso con el ejemplo no ha quedado claro, es la sección en la que mostramos de manera llana y concisa quiénes somos y lo que ofrecemos. En la que exponemos de manera positiva y breve a nuestros clientes potenciales lo que podemos hacer por ellos, pero que también nos sirve para salvar la brecha virtual del mundo online.

Y, si te fijas en el ejemplo, también hay un margen para escribir sobre mí de verdad. Aquí la palabra importante no es “sobre mí”, sino “verdad”. Y no que lo sea (al fin y al cabo, todos valoramos nuestra privacidad), sino que suene como tal. Es decir, estamos generando una identidad que se convierte en una referencia para el lector y que le genera confianza.

A final de cuentas, llegamos a la conclusión de que en realidad no se trata de “escribir algo sobre mí”, ni mucho menos. Se trata de proyectar una imagen pública y, en el mayor número de los casos (cuando se trata de una iniciativa económica, una página web corporativa, un e-commerce, etc.), de proyectar una cierta imagen de marca personal.

Vale, entonces, ¿cómo escribir algo sobre mí? Como he señalado, no es fácil verse desde fuera… De ahí que en este caso más que en ningún otro sea conveniente solicitar los servicios de un copywriter con experiencia. Pero si quieres intentarlo, aquí tienes los tres pasos básicos de la receta:

1. Voy a escribir sobre mí. Mantén este mantra en tu cabeza. Ya hay otras secciones en tu web para mostrar tu gama de productos o loar la calidad de tu servicio. Aquí céntrate en contar quién eres, de dónde vienes, por qué haces esto y cómo has llegado hasta aquí. Y hazlo en primera persona.
2. El toque humano. A la gente que entra en nuestra página web para adquirir un determinado producto o servicio en general no le interesa demasiado si nos gusta el balonmano o si nuestro color favorito es el azul. Sin embargo, hay algo que sí les gusta saber: que detrás del producto o el servicio hay personas. Demuéstralo.
3. Sácale jugo. Ya, todos sabemos que al fin y al cabo esto lo hacemos para vender más y mejor. Y nadie te culpa, pero procura hacerlo bien, pónselo fácil al cliente potencial que se ha leído esto y le está gustando conocerte: coloca enlaces a tu blog, a tu formulario de contacto, a tus redes sociales, a tu catálogo de productos…
4. ¿No dijimos tres? Sí, esto es un bonus: los detalles técnicos. Por ejemplo, comenzar de forma atractiva, no por el clásico (y aburrido) “La compañía inició su andadura en 1984…” o por la primera cita de tus padres. Y saber dar pinceladas amenas y humanas sin sacrificar la profesionalidad que mostramos en el resto de la web. Y no convertir esta sección en un “soy el mejor del mundo mundial”. Eso para empezar.

Luego, claro, está el oficio. Es decir, que cuando has escrito docenas de páginas de este tipo es lógico ir adquiriendo soltura y la capacidad para captar lo que el cliente quiere decir y cómo decírselo al lector. Pero nadie nace aprendido, y todos buscamos inspiración en alguna parte…

Así que, para ponerte todavía más fácil ese pequeño gran desafío que es “escribir sobre mí” en tu página web, aquí tienes una pequeña selección de los que nos parecen algunos de los mejores “Sobre mí” que podemos encontrar en habla hispana:

• Sandra Cobos Psicología. Fíjate en la primera frase, clara y sencilla a más no poder. En este caso, el resto del texto transmite una cercanía que en este tipo de servicio es esencial.
• Qauai. Esta marca de ropa deportiva apuesta por los toques de humor y por insistir en la escala humana de su proyecto, resaltando bien las ideas centrales con letra en negrita.
• Blackie Books. Un buen ejemplo de originalidad que consigue ser muy atractiva, en la forma y el fondo, transmitiendo mensaje y actitud a partir del gancho de “esto no es importante”.
• Yantarte. En este caso, el copywriter pone el acento en la experiencia vivida por el cliente más que en la identidad de la empresa y sus miembros. Los sentidos, en primer plano.
• Santiago Cobo Agrocentro. Aquí se trataba ante todo de resaltar dos valores: profesionalidad y autenticidad. Articulan el texto en cuatro secciones típicas con otros términos. 

Probablemente, la regla de oro que han seguido todos los que han hecho estas secciones siempre haya sido la misma: pensar en el perfil del lector-cliente que encaja con nosotros, con cómo somos y lo que vendemos.

Y tú, ¿quién eres? ¿Quieres que te ayude a contarlo?