Hoy, más que nunca, la presencia en internet resulta fundamental para los negocios. Durante el confinamiento decretado ante la amenaza del Covid-19 hemos presenciado un importante aumento del comercio online. De hecho, según un estudio de la Organización Empresarial de Logística y Transporte (UNO), las ventas online crecieron un 12,5% durante los primeros días de la cuarentena. Esta crisis sanitaria que estamos viviendo, más que una amenaza, podría suponer una oportunidad para todos aquellos negocios que todavía no se han animado a vender a través de internet. Para ello es necesario conocer en profundidad qué textos publicitarios necesita tu tienda online. Y es que, un buen contenido se convierte fácilmente en un imán para las ventas. 

Sé persuasivo, pero no vendas humo

Los textos publicitarios han de ser persuasivos. Al fin y al cabo, el objetivo que persiguen es llevar al lector a la acción y conseguir que se suscriba a nuestra newsletter, participe en un sorteo o como en el caso que nos ocupa, compre nuestros productos. 

No obstante, ser persuasivo no significa convencer a toda costa. El copywriting ha de ser motivar al lector exponiendo los beneficios de determinado producto o servicio, pero no debe caer en el error de sobrevalorar sus cualidades. Destacar los aspectos positivos sí, exagerarlos no.  Al final, si nuestro producto decepciona al cliente le dará la sensación de que somos unos ‘vendehúmos’ y nuestra fama nos precederá. 

Breves y al grano

Los textos publicitarios de una tienda online tienen que ser breves, por regla general. Está comprobado que la mayoría de los lectores no lee los textos al completo, sino que los escanea. ¿Para qué redactar entonces textos interminables si, de media, solo procesamos el 20% de lo que leemos?

Los mensajes breves, directos y concisos penetran mejor en la mente del lector, que es también nuestro potencial cliente. Si bien es cierto que, en función del sector al que pertenezca nuestro negocio, los textos de la web tendrán que tener una extensión u otra. No es lo mismo escribir para la tienda online de una frutería que para un estudio de arquitectura. 

Por este motivo, cuando no quede más remedio que elaborar textos largos, resulta conveniente introducir ladillos, estructurarlo en párrafos cortos e incluir imágenes siempre que se pueda, ya que los expertos aseguran que recordamos hasta el 80% de aquello que vemos. 

Empatiza con tus visitantes

Para que los textos publicitarios de tu tienda online sean efectivos, debes estudiar cuidadosamente a qué tipo de público se dirige tu producto/servicio. Basándonos en ello tendrás que elaborar los mensajes publicitarios que les quieras lanzar.

Piensa una cosa, ¿a que no te diriges igual a un anciano que a un adolescente? Probablemente, el lenguaje y las expresiones que utilices con uno y otro sean muy distintas. Con los clientes ocurre lo mismo. 

Si los conoces, sabes en qué rangos de edad se mueven y cuáles son sus intereses es más fácil que conecten con tus textos. Por este motivo, el registro y tono de tus textos debe adecuarse al de tu público. 

Utilizar expresiones apelativas, lanzar preguntas y describir situaciones cotidianas con las que puedan sentirse identificados también ayudará a reforzar los vínculos de cercanía. 

Crea una urgencia

Para convertir las visitas a tu tienda online en ventas es conveniente crear en el lector una sensación de urgencia y escasez. Es lo que se conoce como ‘paradoja del valor’, que viene a explicar que cuanto menos disponible está un producto más codiciado es. 

Lo hemos visto días atrás con las mascarillas, los guantes e incluso los productos básicos. ¿Quién no recuerda las imágenes de los supermercados llenos ante posibles desabastecimientos? Este es un ejemplo extremo, pero lo cierto es que muchas tiendas online usan pequeños trucos para precipitar la compra del cliente:

  • Señalar que solo queda una unidad disponible.
  • Avisar al cliente de que hay otros diez visitantes interesados en comprar el mismo producto que él.
  • Informar de que determinada oferta finaliza en tan solo 24 horas, acompañando el anuncio de una apremiante cuenta atrás.

Estos recursos son muy utilizados por las aerolíneas y las páginas para reservar alojamientos turísticos, pero bien introducidos pueden aplicarse en prácticamente cualquier sector. 

Seo copywriting con resultado

Resultados a largo plazo

Quienes recelan de los textos publicitarios suelen pensar que la publicidad sigue siendo el recurso más efectivo para dar visibilidad a un negocio. Lo cierto es que la publicidad continúa siendo importante, pero en ocasiones es tan solo un complemento de otro tipo de estrategias.

Apostando por la redacción persuasiva, el dueño de la tienda online conseguirá resultados menos inmediatos, pero más duradero. Elaborar unos buenos textos publicitarios requiere tiempo y, en muchas ocasiones de estudios previos e incluso la puesta en marcha de un plan de comunicación. 

Sin embargo, la publicidad es inmediata, especialmente en internet. Basta con pagar por ella y que nuestro anuncio sea aceptado para que los usuarios nos vean. Pero ojo, esta presencia es muy limitada, ya que durará lo que dure nuestra inversión en publicidad.

Mediante el copywriting las cosas son distintas. Tarda más en penetrar, pero si conseguimos que nuestra tienda se posicione correctamente en buscadores y que el cliente nos recuerda por lo que ha leído de nosotros, sus efectos serán muy duraderos. 

Confía en un profesional del copywriting

En ocasiones, por querer ahorrar unos cuantos euros y pensando que esto de escribir cualquiera puede hacerlo nos negamos a contratar a un profesional. Sin embargo, un redactor publicitario o copywriter puede ser clave a la hora de impulsar nuestro negocio en la red.

Debemos tener en cuenta que saber escribir no conlleva necesariamente saber transmitir emociones al lector. Además, si quien elabora los textos es el responsable o creador del producto corre el riesgo de sobrevalorar lo que tiene entre manos. 

Por último, pero no menos importante, hay que destacar que contratar a un copywriter es una inversión fácilmente recuperable. Pagaremos por sus servicios, pero si hace bien su trabajo las ventas aumentarán y enseguida lo amortizaremos.